HABLAR DE PIBES HOY, NO ES COMO ANTES.

Ya estamos volando y remontando el nuevo barrilete,

lo hizo el pibe para su hermanito llorando,

con los restos de su propio barrilete,

y ahí los tenemos a los dos, jugando...

Hablar de pibes hoy, no es como antes,

hoy los usan para tiro al blanco,

desalmados polinazis, para hacerse los bravos,

y para crear la sicosis de vivir matando.

Hay quienes han traído este espíritu de muerte

y lo han desplegado como una bandera,

tiran a matar, no juegan a la suerte,

hablar de pibes hoy no es lo que antes era.

Yo cazaba palomas y nunca les acertaba,

porque verlas volar era lo que más me gustaba,

pero también me toco jugar de paloma

y sentir por las orejas zumbar las balas.

¡Qué triste saber que esos tiempos volvieron

con el mismo uniforme de milico y de cana!

¡Si habré llorado amigos que se fueron como pájaros

dejándome todo y llevándose nada!

Es inmenso el dolor, yo se que es inmenso,

Alejandro, Carlos, Anibal, Isauro, me lo dejaron,

mejores que yo, más poderosos, más grandes,

me imagino el dolor de las madres llorando.

Pensé que mi antigua lucha traería el "nunca más"

ese que prometimos con alma y corazón,

ese que por razones inocultables y extrañas

ha dejado de ser nuestra mayor pasión.

Hoy veo traidores que ríen triunfadores,

consiguen que la muerte parezca normal,

rodeados de grandes coronas de flores,

confían en que mañana nos vamos a olvidar.

hablar de pibes hoy, no es como antes,

no merecen computadoras, solo merecen hambre,

no merecen escuelas, ni vacunas, ni suerte,

niños y viejos son candidatos a la muerte.

Como antes, los jueces cagones, policías asesinos,

legisladores vendidos, apoltronados, estopa

de una democracia muerta que agoniza,

sin que nadie llore su destino.

El pueblo perdió la brújula que lo guiaba a la calle,

perdió la fuerza que apuntalaba sus valores,

perdió esos dirigentes que surgían como flores,

para jugarse a muerte por todo lo que vale.

Una Patria desnuda, sin hombres de verdad,

es solo un campo desierto para colonizar,

¡Que triste saber después de tanto luchar

que nuestros hijos y nietos no la van a heredar!

Hablar de pibes hoy, ya no es como antes,

perdimos el barrilete y las ganas de armarlo.

¡Que triste no poder enseñarle a un hermanito,

esa magia sublime de hacerlo y remontarlo!

Rodac-25/05/19